Vista parcial de la muralla de Lugo
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La muralla romana de Lugo rodea el casco histórico de la ciudad es la única del mundo que se conserva entera. Por eso y por su misteriosa belleza es Patrimonio de la Humanidad declarada por la Unesco en el año 2000. Fundada por magistrado romano Paulo Fabio Máximo en nombre del emperador César Augusto fue el primer emperador del Imperio romano en el año 13 a. C y está hermanada desde el día 6 de octubre de 2007 con la Gran Muralla China de Qinhuangdao. Se encuentra a unos 300 km al este de Pekín, en el mar de Bohai, en el golfo del mar Amarillo. La leyenda dice que los romanos construyeron la muralla para proteger no una ciudad sino un bosque, el Bosque Sagrado de Augusto, en latín Lucus Augusti, de ahí el nombre de Lugo. Hoy el bosque es un misterio, pero la muralla sigue en pie.
Hace más de 17 siglos siguiendo las directrices de las elegantes obras de Vitruvio, la Muralla de Lugo mide más de 2 km y tiene 10 puertas. Caminar por lo alto de la muralla que en algunos tramos alcanza los 7 metros de ancho, y detenerse en algunas de sus 85 torres es sentir de cerca el poder de la Roma Imperial.
De las 85 torres originales se conservan 71, de ellas 60 son de planta circular y 11 cuadrangular. Debieron estar coronados por torres de dos pisos que tenían ventanales, como atestigua la torre llamada de A Mosqueira en la que todavía permanecen.
El acceso al adarve, se realizaba mediante escaleras embutidas en los muros de las torres. Estas escaleras eran dobles. En la actualidad se accede mediante seis escaleras exteriores a los muros
Los materiales de lo que está construida la muralla son, principalmente, el granito, para los remates de las puertas y ángulos de refuerzo de las torres y las lajas de pizarra, que constituye la exterior de los muros. El interior está relleno de un mortero compuesto de tierra, piedras y guijarros cementados con agua. Se estima que su construcción fue un único proyecto que terminó de realizarse sobre finales del siglo III o la primera mitad del siglo IV.
Además de la amenaza bárbara, la situación e importancia estratégica de la ciudad aconsejaron su construcción. La propia ubicación de la ciudad, bien resguarda el estar en lo alto de una pequeña colina y rodeada por un lado por el río Miño y por otros arroyos. La muralla protegió a la ciudad del viento frío del norte.
Bajo el dominio de los suevos y visigodos Lugo se fue despoblando. Alfonso I de Asturias intentó frenar esa pérdida de población, pero no fue hasta después de su conquista a los musulmanes en el año 998 fue atacada por Almanzor, caudillo del Califato de Córdoba que derribó uno de los lienzos aunque no alcanzó a conquistar la urbe.
En el siglo XVI se comenzaron a construir viviendas en los huecos entre las torres por la parte exterior propiciando el crecimiento ultra muros de la ciudad.
Lugo una ciudad con un espléndido pasado romano como se visita a la Catedral y a la Virgen de los Ojos Grandes, una preciosa talla medieval de piedra policromada. Es una imagen muy venerada en Lugo, cuyo nombre se debe según se dice a su gran expresividad en la mirada. Es una escultura gótica rodeada de ángeles, de tamaño natural y realizado en granito, que ocupa el riquísimo camarín diseñado también por Fernando de Casas y realizado por Miguel de Romay. Esta capilla constituye uno de los ejemplares más vistosos del barroco peninsular.
La estructura defensiva que conformaba la muralla estaba formada por:
• El foso está situado a unos 5 metros de las torres y tenía una anchura de 20 metros y una profundidad de 4 metros. En la actualidad sólo quedan vestigios del mismo no es un foso continuo, sino que está formado por diversos tramos independientes con encuentros acoplados.
• El intervallum era un espacio entre la muralla y las edificaciones urbanas. Recorría toda la longitud de la misma, Con el paso del tiempo este espacio fue siendo ocupado por edificaciones. A mediados del siglo XX había más de 30 edificios adosados a la muralla, invadiendo el intervallum.
En 1837 se realizó la construcción del llamado Reducto Cristina se construyó un baluarte defensivo para la ubicación de artillería entre la puerta del Obispo Aguirre y la torre de A Mosqueira. Se realizó por motivo de las Guerras Carlistas partidarios de Carlos María Isidro de Borbón llamado Carlos V y sus descendientes, y los liberales, partidarios de Isabel II de España conocida por la Reina Castiza. Esta construcción fue bautizada como reducto de María Cristina en honor a la reina Regente, María Cristina de Borbón, madre de Isabel II de España.
Entre 1853 y 1921 se abrieron otras cinco por necesidades de la expansión de la ciudad, de las diez puertas existentes, seis son peatonales y cuatro permiten el tráfico rodado
• 1853 - Príncipe Alfonso.
• 1875 - La Estación.
• 1888 - Obispo Izquierdo.
• 1894 - Obispo Aguirre.
• 1921 - Obispo Odoario.
En 1971 se inició el plan conocido como Operación Muralla Limpia, que tenía como objetivo el librar al monumento de todas las edificaciones adosadas a su paramento exterior.
PRINCIPALES PUERTAS
Puerta de Santiago
Existía ya en época romana y está totalmente modificada. Se conoce desde el siglo XII como puerta del Postigo. Todos estos nombres están relacionados con la existencia de un postigo encuadrado dentro de una puerta más grande. Sus dimensiones son, 4,15 x 5,50 metros y hasta el adarve 6,90 metros. Fue una puerta privada, ya que perteneció a la Iglesia y fue empleada hasta 1589 por los canónigos y sus sirvientes con el fin de acceder a las huertas. Esta puerta era la única que permanecía abierta en tiempos de peste. Fue ensanchada en 1759 por el Obispo Izquierdo y Tavira para facilitar la entrada de carruajes.
Tiene un templete en el que se colocó una imagen de Santiago Matamoros y en la parte inferior el escudo de armas del Obispo Izquierdo. Cuando se accede al recinto histórico por esta puerta el viajero se encuentra con la majestuosa Catedral de Santa María.
Puerta del Obispo Aguirre
Es la cuarta puerta abierta en el año 1894. Su apertura se debe al deseo de facilitar la comunicación con el nuevo seminario, construido por orden del Obispo Aguirre, y con el antiguo cementerio. Situada en una ladera, mide 10 metros de ancho, la altura hasta la clave es de 8,15 metros y hasta el adarve, de 9 metros Al igual que el seminario, la realizó el arquitecto Nemesio Cobreros Cuevillas. En su construcción se derribaron dos torres de la muralla que contenían lápidas romanas.
Puerta de San Pedro
Ya existía en época romana. También en época medieval es conocida como Puerta Toledana al estar situada al final del camino procedente de Castilla, empleado sobre todo por mercaderes toledanos que comerciaban en la ciudad. Situada en una vaguada, mide 3,70 metros de ancho y unos 4,85 metros de altura hasta la clave. La decoración se encuentra en el exterior de la puerta, por ser una puerta principal de entrada. Hoy en día aún se ve un frontón triangular con el escudo de la ciudad, y una cartela oval con la inscripción del año de reconstrucción de la puerta.
Esta puerta fue y sigue siendo la entrada a la ciudad para los millares de peregrinos que se desplazaban hasta Santiago de Compostela en la Edad Media a través del Camino Primitivo. Por aquí también se sale al Camino Real de Castilla hacia Astorga. Atravesando la puerta, encontraremos unas escaleras que nos permiten subir a la Muralla.
Puerta de la Estación
Se abrió a petición de algunos vecinos como consecuencia de la necesidad de comunicar la ciudad con las vías del ferrocarril. En 1921 se ampliaría aún más, en una obra que supuso el derribo de la primera puerta y la construcción de la actual. La escasez de elementos ornamentales responde a la precaria situación económica, debido a las deficiencias presupuestarias provocadas por la Primera Guerra Mundial. La Puerta proyectada por Nemesio Cobreros en 1875 y derribada en 1921.. Su anchura es de 10 metros, su altura hasta la clave de 8 metros y hasta el adarve de 9 metros. Atravesando la puerta, encontraremos a la derecha unas escaleras que nos permiten subir a la Muralla.
Puerta Falsa
Esta es una de las antiguas puertas romanas de la Muralla, era conocida como Puerta del Boquete aunque muy modificada. Cerrada seguramente durante la Edad Media, se abrió en el siglo XVII al instalarse en la actual plaza de Ferrol el Hospital de San Bertomeu, antes situado en la plaza Mayor. Por esta puerta entraban y salían los correos durante muchos años fue la más próxima al camino de La Coruña, sede de la Capitanía General y de la Audiencia. Ya en el siglo XX se cierra al tráfico y se dota de un acceso con escaleras. El ancho es de 3,45 metros, el alto hasta la clave es de 5,65 metros y hasta el adarve, de 11,50 metros. Atravesando la puerta, a la izquierda encontraremos unas escaleras que nos permiten subir a la Muralla.
Puerta de San Fernando
Fue la primera de las puertas modernas. Se abrió en 1854 en el lugar donde estaba el llamado Boquete, por donde entraba en la ciudad el acueducto de origen romano. En 1858, con motivo de la visita de Isabel II y sus hijos, se le dio el nombre de Puerta del Príncipe Alfonso, en honor del futuro Alfonso XII, un niño de apenas un año de edad.
En 1962 se reforma, debido a toda la población que se instala en el norte de la ciudad y la dificultad del tráfico, y se decide ensanchar la puerta derribando los edificios arrimados a la Muralla en su parte exterior, catorce años después. En la actualidad, un monolito al lado de esta puerta recuerda otra visita real, la que hicieron en 1976 los Reyes, Juan Carlos I y Sofía de Grecia. Atravesando la puerta tenemos la iglesia de San Froilán, patrón de Lugo.
Sus medidas son, 12,5 metros de ancho, 7,50 metros de alto. Tiene una bóveda de cuerno de vaca, o de paso oblicuo. Es uno de los principales accesos a la ciudad vieja y permite el paso de vehículos y peatones a la vez.
Puerta Nueva
época romana, era la salida de la ciudad hacia Betanzos. Hasta la construcción en 1854 de la Puerta de San Fernando fue la principal vía de comunicación de la parte norte de la ciudad. En la época medieval se rehízo y es mencionada en la documentación del siglo XII como Puerta Nueva.
La puerta actual fecha del año 1900, se debe al arquitecto Juan Álvarez de Mendoza dado que la anterior estaba en estado ruinoso y amenazaba la seguridad de los viandantes. Para la construcción de esta puerta nueva hubo que derribar un cubo de la Muralla. Mide 4,60 metros de ancho, la altura hasta la clave es de 8 metros y el alto hasta el adarve mide 8,95 metros. En este punto desde el adarve de la Muralla se contempla una típica estampa de la ciudad con las torres de la Catedral de Lugo al fondo. Atravesando la puerta, a la derecha encontraremos unas escaleras que nos permiten subir a la Muralla.
Puerta del Obispo Odoario
En 1921 con motivo de la colocación de la primera piedra del Hospital de Santa María. El alcalde Ángel López Pérez ordenó dinamitar la Muralla para abrir la puerta, pero lo hizo sin permiso. Cinco vecinos denunciaron contra el Ayuntamiento. Este hecho provocó que el 16 de abril de ese año el Estado declarara Monumento Nacional a la Muralla de Lugo, con el fin de dotarla de más protección. La nueva puerta se finalizaría finalmente en 1928. por el arquitecto Ramiro Sainz Martínez. Mide 12 metros de ancho, la altura hasta la clave es de 9,10 metros y hasta el adarve, 10 metros.
Puerta Miñá o del Carmen
Es la puerta de origen romano que se conserva con menos modificaciones. Conocida popularmente en la actualidad como Puerta del Carmen por estar ubicada frente a la capilla de este nombre, por ser la salida natural hacia el río Miño, nombre que derivó en el actual de Puerta Miñá. Tiene 3,65 metros de ancho. Atravesando la puerta, encontraremos unas escaleras que nos permiten subir a la Muralla. El Camino Primitivo a Santiago deja atrás la ciudad al salir por esta puerta.
Puerta Obispo Izquierdo
Con motivo de la inauguración de la nueva cárcel en 1887, se hizo necesaria la apertura de esta nueva puerta para facilitar el cambio de guardia y el acceso al juzgado. También conocida como Puerta de la Cárcel, fue la tercera puerta que se abrió durante el siglo XIX.
Mide 4,32 metros de ancho, la altura hasta la clave es de 7,15 metros y hasta el adarve, de 8,10 metros. Para su construcción se aprovechó la piedra del derribo y el sobrante se empleó en la construcción de alcantarillas a las afueras de la Puerta de San Fernando y para llenar la diferencia de nivel existente entre la ronda exterior de la Muralla y la que hoy es la plaza del Campo Castelo. Atravesando la puerta encontramos la plaza de Campo Castelo, donde hay unas escaleras de acceso a la Muralla.
Autor: Narciso Casas - Profesor de
Arte y Escritor.
Fuente: Mi
libro titulado Patrimonio Mundial Cultural de la Humanidad en
España.
ISBN:
978-84-686-7933-4
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